NOCHE ESPECIAL
El baile de promoción esta aquí. Todo lo que importa es esa noche. Todo lo que se ha hecho es para esta noche. Solo esta noche. Solo esto importa.
Bonnibel ya tenia su vestido listo. Era rosa y de diseñador. Lo había visto hace aproximadamente TRES MESES en un catalogo de Paris, y le gusto tanto que lo compro. Su vestido era lujoso, no solo por ser caro sino por lo hermoso que era. Sin duda era de ese tipo de vestidos que daba pena usarlos una sola vez. Y aunque en un inicio ella lucia muy feliz de usarlo y ser alabada como la "mejor vestida del baile" ahora nada de eso le importaba. Su mente giraba al rededor del señor Cremoso. Aquel hombre no salia de sus pensamientos. Nada era igual desde que lo había conocido. El era paz en su estrezada vida. Con él, ella se sentía libre y calmada. El tiempo ya no importaba. El era el hombre para ella. "Cuando uno prueba la fruta mas dulce de la cosecha, todas las demás serán amargas a su comparación". Bonnibel vivía pegada a su celular, y por el chat le pedía de miles de formas que el, viniera y la acompañara al baile. El siempre decía que no podía por el viaje, el dinero, el tiempo... Ella estaba considerando pagarle el vuelo... pero no sabia como proponerselo sin aparentar "estar desesperada por un hombre"
Marceline se había olvidado lo mas importante del baile de graduación: el vestido de graduación. A ultima hora fue a comprar un vestido, sin embargo ni uno era de su agrado. "Todos son para niñas bobas" Todos los vestidos eran de colores pasteles o con lazos de colores. Ella quería algo sexy, corto, pegado y si tenia algo rojo mejor. Nada era como ella quería.
Una chica en la tienda se le acerco: "Buenas tardes, que es loq ue esta buscando?" "Algo negro" La señorita llevo a Marceline hacia un vestido negro y largo. Era muy formal. "Busco algo mas corto" La señorita llevo a Marceline hacia un vestido negro y corto. "Busco algo con vida" La señorita saco ese vestido y detrás, justo detrás estaba un vestido que parecía un tutu de ballet pero negro, pegado, corto, sexy y con brillos en la cintura. No tenia nada rojo, pero era lo mejor que habia encontrado en el dia. LO compro de inmediato, le agradoq ue el vestido estuviera con 25% de descuento.
Fiona necesitaba un vestido, se lo había pedido a sus padre y ellos le habían dado una buena noticia. Ella usaría el vestido que su madre uso cuando ella salio a la primera cita con su padre. Ese vestido tenia mucho significado, era como usar una parte de la historia de su familia. El día del baile, Margaret le llevo una caja grande y blanca a Fiona. Ambas abrieron la caja y dentro estaba un vestido que ella no había imaginado. Fiona pensaba en un vestido con flores "algo blanco, con flores, nada pegado y de seguro encajes religiosos" pero era todo lo contrario. Era celeste ( su color favorito) y corto. MUY CORTO. "MI madre debió ser una modelo"
Bonnibel ya tenia su vestido listo. Era rosa y de diseñador. Lo había visto hace aproximadamente TRES MESES en un catalogo de Paris, y le gusto tanto que lo compro. Su vestido era lujoso, no solo por ser caro sino por lo hermoso que era. Sin duda era de ese tipo de vestidos que daba pena usarlos una sola vez. Y aunque en un inicio ella lucia muy feliz de usarlo y ser alabada como la "mejor vestida del baile" ahora nada de eso le importaba. Su mente giraba al rededor del señor Cremoso. Aquel hombre no salia de sus pensamientos. Nada era igual desde que lo había conocido. El era paz en su estrezada vida. Con él, ella se sentía libre y calmada. El tiempo ya no importaba. El era el hombre para ella. "Cuando uno prueba la fruta mas dulce de la cosecha, todas las demás serán amargas a su comparación". Bonnibel vivía pegada a su celular, y por el chat le pedía de miles de formas que el, viniera y la acompañara al baile. El siempre decía que no podía por el viaje, el dinero, el tiempo... Ella estaba considerando pagarle el vuelo... pero no sabia como proponerselo sin aparentar "estar desesperada por un hombre"
Marceline se había olvidado lo mas importante del baile de graduación: el vestido de graduación. A ultima hora fue a comprar un vestido, sin embargo ni uno era de su agrado. "Todos son para niñas bobas" Todos los vestidos eran de colores pasteles o con lazos de colores. Ella quería algo sexy, corto, pegado y si tenia algo rojo mejor. Nada era como ella quería.
Una chica en la tienda se le acerco: "Buenas tardes, que es loq ue esta buscando?" "Algo negro" La señorita llevo a Marceline hacia un vestido negro y largo. Era muy formal. "Busco algo mas corto" La señorita llevo a Marceline hacia un vestido negro y corto. "Busco algo con vida" La señorita saco ese vestido y detrás, justo detrás estaba un vestido que parecía un tutu de ballet pero negro, pegado, corto, sexy y con brillos en la cintura. No tenia nada rojo, pero era lo mejor que habia encontrado en el dia. LO compro de inmediato, le agradoq ue el vestido estuviera con 25% de descuento.
Fiona necesitaba un vestido, se lo había pedido a sus padre y ellos le habían dado una buena noticia. Ella usaría el vestido que su madre uso cuando ella salio a la primera cita con su padre. Ese vestido tenia mucho significado, era como usar una parte de la historia de su familia. El día del baile, Margaret le llevo una caja grande y blanca a Fiona. Ambas abrieron la caja y dentro estaba un vestido que ella no había imaginado. Fiona pensaba en un vestido con flores "algo blanco, con flores, nada pegado y de seguro encajes religiosos" pero era todo lo contrario. Era celeste ( su color favorito) y corto. MUY CORTO. "MI madre debió ser una modelo"
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